Un tropezón...no es caída

Almirante jugo uno de los peores partidos desde su regreso a La BN, y no pudo con Quilmes que se impuso por 2 a 0.

"Nos costó manejar la pelota, y también fue difícil jugar con ese árbitro. Tuvimos que cuidarnos más de él que de Quilmes, porque ellos metían, podían ir deméntemente (sic) y no pasaba nada. A nosotros nos sacó tres amarillas en diez minutos y eso nos limitó", abrió fuego el entrenador. Se trató de una bronca que explotó ayer, pero que ya tenía dinamita cargada hace rato... Porque el mismo árbitro fue protagonista durante aquel 23/9, cuando La Fragata cayó 1-0 con Tiro en cancha de Italiano, y expulsó a Escudero a los 10'' de la primera etapa (Olé lo calificó con un 4). Pero en esta oportunidad, la crítica del DT no fue tan acertada, según lo que arrojaron los datos del match: el hombre de negro —ayer vestido de rojo— amonestó a cinco jugadores de Quilmes, dos más que al Mirasol. "Cuando nos echó al primer tipo (se refirió a Deláguila, el único que vio la roja) se complicó todo. No midió con la misma vara para ambos lados. Pasa que algunos árbitros tienen la personalidad como para dirigir estos partidos, otros no... Conforme no estoy, conforme debe estar el árbitro. En este tipo de encuentros sos visitante, visitante de verdad", disparó otra vez Giunta.

Pero dentro de tanto reclamo masivo al aire, también hubo tiempo para la autocrítica luego de la derrota. O mejor dicho, se trató de un poco de reflexión. "No estuvimos al nivel de otros juegos. Ahora la meta nuestra es sacar de nueve a diez puntos en lo que resta del año", finalizó el entrenador. Hay tiempo.

Luego de una pelea en la semana, Román Díaz y Basualdo jugaron juntos sin problema.
¿Y cómo fue? Normal, como si nada hubiera pasado. Los dos integraron el team titular y no hubo encontronazos. Es más, en el complemento hasta se pararon juntos para armar la jugada de un tiro libre que finalmente fue ejecutado por Basualdo, y que rozó la parte externa del ángulo izquierdo de Pontiroli. Esa fue una de las jugadas más claras para el conjunto de Blas Giunta, casualmente con ambos en escena. Si hubo acuerdo entre las partes, no se sabe, pero al menos en la cancha tiraron para el mismo lado.