Y finalmente se dio la lógica en Rosario. Central Códoba no le pudo aguantar ni un tiempo a Almirante, que le mostró la chapa de candidato, le ganó 2-0 y está cada vez más firme en los primeros puestos del campeonato.
Arrancó con todo el equipo de Blas Armando Giunta, que con sólo unos minutos de juego ya había inquietado a Lacerre en un par de ocasiones. Sin embargo, y aguantando el sofocón del principio, Córdoba tomó el medio gracias a la gran labor de Delmastro, se empezó a adueñar de la pelota y, si bien no fue profundo, manejó los hilos del partido. En este contexto, las diferencias marcadas por la tabla de posiciones se perdían en el campo.
Arrancó con todo el equipo de Blas Armando Giunta, que con sólo unos minutos de juego ya había inquietado a Lacerre en un par de ocasiones. Sin embargo, y aguantando el sofocón del principio, Córdoba tomó el medio gracias a la gran labor de Delmastro, se empezó a adueñar de la pelota y, si bien no fue profundo, manejó los hilos del partido. En este contexto, las diferencias marcadas por la tabla de posiciones se perdían en el campo.
Pero el fútbol no perdona los errores. Cuando caducaban los primeros 45 minutos, Maraschi le devolvió una pared genial a Ferrer, quien entrando al área la paró de pecho y la clavó bien arriba.
Con la obligación de levantar un resultado que parecía irremontable, los del Trinche salieron a buscarlo en el ST, pero los nervios les jugaron una mala pasada. Con el campo rival a su merced, el gol de Almirante se caía de maduro. Y fue así que tras un córner, Mena se aprovechó de la lenta defensa local y sentenció el encuentro.
